Es sorprendente lo que se ve hoy por televisión. Parecen estar de moda los “realitys” donde, mientras más patético o morboso sea el tema, mejor.
Eso es lo que muchos ven para comer, “descansar” por la tardes o antes de dormir. Es lo que a veces pagan por ir a ver al cine, al teatro o a una feria.
“Es solo para entretenerse” podrás decir, pero también hay algo que debes considerar: tu mente no distingue, al menos a nivel emocional, la realidad de la ficción.
Es por eso que lloras en una película triste, te agitas y brincas en una película de terror o te emocionas cuando ves alguna hazaña de un héroe de acción. Al menos dentro de ti, todo lo que estás viendo ES real.
Desde hace tiempo me hice a la idea de no ver dramas y no por alguna cosa religiosa o algo así; simplemente tenía más que suficientes problemas en la vida como para ir a sufrir los problemas de alguien más.
¿Ir a ver una película donde alguien no tiene dinero, está ahogado por las deudas y no puede salir del hoyo? No gracias. Veo eso todos los días.
Mejor una buena historia de alguien que logró el éxito a pesar de tener todo en contra o quién logró ganar mucho dinero al arriesgar todo lo que tenía.
Es por eso que muchos salen de ver una película de baile queriendo bailar o de una de carreras queriendo subirse a un auto y ganarle a todo mundo.
Aunque no lo creas, te puedes “entrenar” viendo la televisión o un video, siempre y cuando le des a tu mente lo que necesita para lograr tus objetivos.
Si te avientas dos horas de ver como un tipo es tan gordo que nadie lo quiere y que tiene que ir al hospital en grúa, difícilmente tu mente hará la conexión.
No puedes controlar muchas cosas, pero sí puedes controlar lo que le das a tu cerebro todos los días. Tal vez eso sea algo que te haga falta en tu mezcla para el éxito…
No hay comentarios:
Publicar un comentario