Una de las cosas que hacemos mucho las personas es dejarnos llevar por las emociones. No se puede decir que sea bueno o malo; simplemente es parte de lo que nos hace humanos.
En algunos casos es bueno, emocionante y hasta hermoso. Dejarse llevar por la emoción en una montaña rusa hace que la experiencia sea mejor. Dejarse llevar por el deseo con tu pareja te lleva a un momento de más intimidad y placer.
Hay tantas cosas que son mejores cuando nos dejamos llevar que llevaría mucho tiempo escribirlas todas. Además, como en muchas otras cosas, cada quién tiene su opinión y las situaciones y circunstancias pueden variar mucho.
El problema es que dejarse llevar también te lleva a cosas malas… Hay quienes se dejan llevar por la ira y acaban hasta matando a alguien más, sin realmente haber querido hacerlo. Dejarte llevar por la avaricia y tratar de ganar más dinero sin importar los medios puede dejarte peor de lo que te imaginas.
Sin embargo, a pesar de que somos muy emocionales, para bien o para mal, también tenemos la habilidad de controlar lo que pensamos.
Así como has aprendido a controlar algunas cosas, como no llorar en público para los hombres, también puedes utilizar tu mente para no dejarte llevar en las cosas que te afectan.
Tal vez te tome un poco de tiempo pero bien valdrá la pena. Si como niños podemos ser condicionados por la sociedad a hacer y pensar muchas cosas, lo mismo podemos hacer para condicionar nuestro propio futuro.
Existen varias técnicas para lograr esto, desde terapias guiadas hasta cintas subliminales. Cada una de ellas puede tener distintos resultados según la persona y también tienen sus puntos buenos y malos.
Solo es cuestión de decidirse y empezar a dejar de dejarse llevar por lo malo y solo escoger lo bueno. La decisión es también ventaja de los humanos.
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